Iñigo Núñez repasa la temporada de Santurtzi Basket

La falta de apoyos económicos ha impedido inscribir al equipo en LEB Plata tras el ascenso conseguido en la cancha, una enorme decepción para el baloncesto santurtziarra, ¿no es así?
Es una gran pena no haber materializado en los despachos el logro conseguido en la cancha. Personalmente me quedo con la sensación de haber hecho todo lo posible en la pista y fuera de ella para que esa situación se diera. Debemos aprender la lección de que hay veces que no sólo vale con intentarlo, que a veces incluso en esas situaciones las cosas salen mal y tenemos que ser mejores. Hay que buscar un enfoque distinto para que el año que viene también pueda ser bueno.

Pese a todo, y con la perspectiva que otorga el paso de las semanas, ¿cómo valoras la gesta conseguida desde el punto de vista deportivo?
Lo valoro con la palabra utilizada en la pregunta: una gesta. Creo que pasará a la historia del Club la extraordinaria campaña realizada y la inmaculada fase de ascenso que completamos en Huelva. Fue irrepetible, algo que no volveré a vivir nunca de manera tan redonda porque tuvo todos los ingredientes. Además de ser la primera, haber podido disfrutarlo con las personas que más quiero ha marcado la diferencia. Y lograrlo al lado de este enorme cuerpo técnico y de un equipo formado por tan grandes personas es probablemente irrepetible. Estoy muy orgulloso .

¿Cuáles crees que fueron las claves para lograr este hito?
Desde luego, la fortaleza del grupo humano. Todos los jugadores y componentes del cuerpo técnico son personas extraordinarias que han formado un equipo humanamente estupendo. Ha sido muy fácil entrenarles y pasar tiempo con ellos porque, además, han estado alineados en la búsqueda del objetivo desde el primer instante. Han tenido una capacidad impresionante de trabajar para el compañero y remar todos juntos. Es el grupo que siempre hubiese querido entrenar. Personalmente, el apoyo que he tenido por parte de Asier, Lukas, Ander y Eider es algo inexplicable y que he de agradecer, ya que han trabajado con el máximo cariño y profesionalidad.

¿Cómo has vivido la ilusión de los seguidores a lo largo de esta temporada?
Lo que ha sucedido esta temporada con nuestra afición ha sido impresionante. Los fieles e históricos no han fallado y han apoyado más que nunca y, además, la Herri Harmaila ha estado más poblada, ilusionada y activa que nunca. Esta última parte se la debemos fundamentalmente a mi amigo Borja Martín, que ha logrado despertar ese interés. Creo que el Polideportivo Mikel Trueba ha registrado varias de sus mejores entradas de siempre y eso es una muestra de proyecto de club y es prueba del trabajo, también, de toda la directiva y dirección deportiva a lo largo de los años.

Pese a la decepción por no estar en LEB Plata, es indudable que el club está creciendo.
Sí, tanto en volumen como en calidad. Seguimos buscando niños que quieran hacer basket y que tengan referentes masculinos y femeninos. Queremos tener más jugadores escolares para manejar más volumen y poder trabajar mejor y darle sentido a todo el trabajo que estamos haciendo. El basket es un deporte colectivo de valores muy fuertes y no les va a decepcionar, porque además en el Club Baloncesto Santurtzi somos una familia.