‘Dale al botón’, una exposición fotográfica hecha para dejarse llevar
‘Peli’ mostrará del 16 de mayo al 5 de junio en la Casa Torre, 60 imágenes con temáticas de todo tipo realizadas desde la pasión, sin etiquetas ni barreras, donde la libertad se respira en cada foto
Del 16 de mayo al 5 de junio, la Casa Torre acoge ‘Dale al botón’, una exposición fotográfica que reúne alrededor de 60 imágenes de lo más variadas y con diferentes tamaños. Paisajes, retratos, escenas callejeras, conciertos, grupos de música, perros y personas anónimas conforman esta muestra ecléctica, hecha desde la libertad total de quien se acerca a la fotografía desde la pasión y no desde las etiquetas.
“No me dedico a un tema específico, lo hago a nivel aficionado y no me he puesto ninguna barrera”, comenta ‘Peli’, autor de la exposición. Esa libertad se respira en cada fotografía, que invita al visitante a observar sin prejuicios y a dejarse llevar por sensaciones. No hay una línea temática cerrada ni un hilo argumental: hay momentos capturados, atmósferas, emociones y, sobre todo, hay ganas de compartir.
El autor reconoce tener especial cariño a una sesión muy concreta: un retrato al cantante del grupo Manifa (Mena), realizado en un pasillo oscuro de una casa abandonada, en el que una pareja se topó con la escena y salió espantada por la intensidad del personaje y del entorno. “Se llevaron el susto de su vida, jaja”, recuerda entre risas.
Más allá del humor y de la anécdota, ‘Dale al botón’ quiere ser también un mensaje de ánimo: “Me gustaría que quien venga se vaya con la sensación de que cualquiera que se prepare un poquito puede hacer lo mismo que yo… o incluso mejor”. Es el resultado de más de cien sesiones con personas que, poco a poco, han confiado en su forma de mirar. “Mucha gente me decía que tenía que hacer sesiones a la gente, que tenía que hacer alguna exposición… y al final me lancé al vacío. Es la hora”, recalca.
Para ‘Peli’, la fotografía “es crear y eso ya es increíble, una fotografía te transporta o te hace sentir cosas increíbles”. Le permite estar al día, dominar los avances tecnológicos, jugar con la luz, aprender edición y, sobre todo, conocer gente nueva. “Eso enriquece el alma”, afirma. Si tuviera que definir su estilo, lo tiene claro: “Lo voy a llamar Dale al botón”. Una invitación, en definitiva, a mirar el mundo con otros ojos, a perder el miedo al disparo y a entender que, a veces, lo único que hace falta es atreverse. Eso, y darle al botón.